¿Es cierto que hay música para adelgazar? Si quieres perder kilos, no lo vas a conseguir sólo escuchando música, pero hay determinados tipos de música que pueden ayudarte.
Relación entre la música y la alimentación
Escuchar música durante la comida, nos ayuda a comer menos. Hay diferentes estudios que demuestran que en condiciones ruidosas o de estrés se tiende a consumir más alimentos. Sin embargo, si creamos un ambiente relajado, con música suave, conseguiremos apreciar con más nitidez la sensación de saciedad y ralentizaremos la ceremonia de la comida hasta consumir solo lo justo, lo que necesitamos.
Por otro lado, diferentes estudios determinan que cuando escuchamos canciones lentas y melódicas nos alimentamos de manera más saludable que cuando escuchamos ritmos más rápidos. Cuando la música tiene un ritmo dinámico nos decantamos por alimentos más calóricos.
Volumen de la música para adelgazar
Un estudio de la Universidad del Sur de Florida concluye que el volumen de la música también influye en cómo nos alimentamos. Un volumen bajo va a ser más fácil para elegir productos saludables. Un volumen alto hará que tomemos alimentos más calóricos. El ejemplo más claro lo tienes al observar el volumen de la música ambiental en los restaurantes de comida rápida.
Música y ejercicio
Al hacer ejercicio con música añadiremos al deporte un elemento motivador que aumenta nuestra concentración y mejora el rendimiento. Estos son los efectos que tiene la música en la práctica del ejercicio:
- Disminuye la sensación de cansancio: está demostrado que en el running y en la caminata, la música incentiva el ejercicio y disminuye la percepción de esfuerzo, por lo que aumenta el rendimiento.
- Escuchar música después de hacer ejercicio ayuda a una recuperación más rápida. Concretamente la música lenta produce mayor efecto de relajación.
Canciones para relajarte y comer saludable
- Reproduce sobre todo música clásica, o temas instrumentales que no distraigan tu mente. Aunque no te guste mucho, si la pones de fondo actuará sobre tu cerebro casi sin darte cuenta. Prueba con El Adagio de Albinoni y verás.
- Usa temas que no te traigan malos recuerdos, sino recuerdos felices. Deben pintar una sonrisa en tu rostro.
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